La Operación Atarraya desplegada por el Gobierno del Estado de México, la fiscalía estatal y autoridades federales permitió el cierre de 800 bares, “chelerías” y barberías con carpetas de investigación por delitos relacionados con venta de drogas, extorsión, robo y secuestro en 50 municipios mexiquenses.
Este operativo, novedoso en la administración de la Gobernadora Delfina Gómez Álvarez, cuenta con el apoyo de la ciudadanía que incluso piden que sea una acción permanente.
“A mí me parece una excelente medida, definitivamente, la verdad es que está en la vía pública, o sea no está encerrado, lo cual, en el caso de nosotros nos genera problemas porque los días que tenían más trabajo había muchísimas motocicletas, que agarran toda la banqueta, y es sabido que cuando llegan muchas motos podrían llegar algunos delincuentes, entonces se adueñan de la acera. Me parece muy buena la medida, pero lo más importante es que sea permanente”, destacó Eduardo Rojas, vecino de Naucalpan.
Las acciones inéditas del Operativo Atarraya han sido realizadas en municipios como Nezahualcóyotl, Ecatepec, Ixtapaluca, Naucalpan, La Paz, Chimalhuacán, Tlalnepantla y Toluca, entre otros, y han permitido desmantelar redes utilizadas por grupos delictivos para cometer hechos delictivos, de acuerdo con la fiscalía del Estado de México y el Secretario de Seguridad del Estado de México, teniente coronel Cristóbal Castañeda.
Con información del periódico Excésior
