Toluca, Méx; 19 de enero de 2025. – Debido al aumento de las enfermedades crónico degenerativas como la diabetes tipo 2 entre la población mexiquense, la investigadora de la Facultad de Medicina de la Universidad Autónoma del Estado de México (UAEMéx), Roxana Valdés Ramos, investiga la relación de la alimentación con el estilo de vida para comprender mejor esta patología y desarrollar estrategias de prevención, así como concientizar sobre la importancia de una alimentación saludable.
“A nivel nacional, alrededor de 12 por ciento de la población mexicana tiene diabetes tipo 2 diagnosticada; sin embargo, existe otro porcentaje equivalente que no tiene un diagnóstico, ya que, desafortunadamente, los síntomas no son lo suficientemente graves al principio como para que la persona acuda al médico a revisión”, detalló.
La también líder del Cuerpo Académico de Nutrición y Salud de la Facultad de Medicina ha adaptado el enfoque de sus investigaciones, abordando en particular, la diabetes mellitus tipo 2, que se ha convertido en un problema de salud pública importante, ya que está estrechamente relacionada con la obesidad y aumenta el riesgo de enfermedades cardiovasculares.
“La diabetes no es una enfermedad que se hereda genéticamente y que da porque te va a dar, más bien es una enfermedad que se adquiere por tener un estilo de vida inadecuado, se puede tener el antecedente familiar, pero no necesariamente desarrollar la patología”, explicó.
En este sentido, la académica destacó que la nutrición es un factor importante para la prevención de enfermedades crónico degenerativas, ya que se pueden prevenir hasta cierto grado. Por ello, destacó que es fundamental concientizar a la ciudadanía sobre la importancia de la prevención, adoptando hábitos saludables desde la infancia.
En sus investigaciones, Valdés Ramos ha encontrado que existe una deficiencia de ácidos grasos omega-3 y vitamina D en la población de la entidad mexiquense, especialmente en adolescentes y adultos. Uno de sus hallazgos es que el consumo de pescado, que es rico en omega-3, resulta ser bajo, a pesar de la producción local de trucha. Además, la exposición al sol, la cual es la fuente principal de vitamina D, resulta ser limitada.
Roxana Valdés comentó que para tener una alimentación saludable, la ciudadanía puede apoyarse del consumo de productos de temporada y locales. Asimismo, cambiar los hábitos alimenticios puede llegar a ser complicado, especialmente cuando se trata de costumbres arraigadas; sin embargo, con educación y ayuda se puede hacer una transición hacia una alimentación más saludable y sostenible.
Actualmente, la académica se encuentra realizando un proyecto de investigación que explora los beneficios de la vitamina D en personas con diabetes, que tendrá una duración aproximada de seis meses. La diabetes provoca una inflamación crónica que puede dañar diversos órganos. El objetivo será determinar si la suplementación con vitamina D puede ayudar a reducir esta inflamación y, por lo tanto, mejorar la salud de los pacientes con diabetes.
Finalmente, Roxana Valdés ha demostrado que el género no es un obstáculo para el éxito profesional. Su única limitante han sido las barreras impuestas por estereotipos, pero con preparación y determinación se pueden superar. La investigadora invitó a la comunidad universitaria, que aspira a adentrarse a la ciencia a que si tiene curiosidad, ganas de aprender, buscar respuestas y ampliar horizontes, la ciencia es un camino apasionante y accesible para todos y todas.