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Legisladores del Edomex Impulsan Aumentar Penas por Hostigamiento y Abuso Sexual
El Congreso del Estado de México comenzó el análisis de una iniciativa de reforma al Código Penal estatal, propuesta por la Gobernadora Delfina Gómez Álvarez, que busca ampliar los supuestos delictivos y agravar las penas de prisión por hostigamiento y abuso sexual. Legisladores de la LXII Legislatura coincidieron en que esta medida es crucial para garantizar una vida libre de violencia para mujeres, niñas, niños, adolescentes y personas vulnerables.
Ejes de la Reforma: Más Castigo y Menos Impunidad
La iniciativa, analizada en las Comisiones de Procuración y Administración de Justicia, y para la Igualdad de Género, tiene como objetivo homologar estos delitos a nivel nacional, en línea con el Pacto de Xicoténcatl y la campaña anunciada por la Presidenta Claudia Sheinbaum Pardo contra la violencia de género.
La propuesta plantea sanciones severas:
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Hostigamiento Sexual: Penas de hasta nueve años de prisión.
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Abuso Sexual: Penas de hasta 20 años de prisión.
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Persecución de Oficio: Los delitos se perseguirán sin necesidad de ratificación de la víctima.
La diputada Itzel Daniela Ballesteros Lule (morena) afirmó que la iniciativa "transforma la manera en que el Estado enfrentará la violencia sexual" al endurecer penas, garantizar seguimientos y obligar a la reparación integral del daño.
Ampliación del Marco Legal
El encargado de despacho de la Dirección General de Legislación, Javier de Jesús Domínguez González, destacó que la reforma incluye aspectos fundamentales:
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No Presumir Consentimiento: El silencio, la pasividad o la inactividad de la víctima no podrán interpretarse como consentimiento.
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Sanciones a Servidores Públicos: Se castigará a servidores públicos que sean omisos o disuasivos ante las denuncias.
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Terapia Obligatoria: Las personas agresoras serán enviadas a tomar talleres educativos contra la violencia.
La reforma amplía el concepto de hostigamiento sexual para incluir la conducta de naturaleza sexual no consentida a cualquier persona subordinada, que lesione su dignidad o que sea indeseable, valiéndose de una posición de jerarquía (laboral, docente o institucional).
En el caso de abuso sexual, se aplicará a cualquier acto sexual sin consentimiento (tocamientos, caricias, exhibiciones, etc.) sin el propósito de llegar a la cópula, obligando a la víctima a exhibir su cuerpo u observar el acto. Además, se enfatiza que la voluntad de la persona anulada o viciada por violencia, intimidación o abuso de autoridad no se considera consentimiento.
La diputada Araceli Casasola Salazar (PRD) calificó la reforma como indispensable para garantizar justicia y un sistema de no revictimización, especialmente contra quienes abusan de su jerarquía.