PREVENIR CON EDUCACIÓN LOS FENÓMENOS NATURALES

La falta o abundancia de agua en la entidad siempre ha de generar problemáticas para el territorio y para la población que lo habita; tal fue el caso del largo periodo de sequía que han venido padeciendo los municipios mexiquenses, sobre todo aquellos que se ubican en la zona norte.

Mientras que, en la actualidad, diversas localidades se han visto afectadas por lluvias excepcionales que han generado encharcamientos, deslaves, inundaciones y desafortunadamente, la pérdida de vidas humanas. Tal como ha ocurrido recientemente en Chalco, Jilotzingo, Tejupilco, Naucalpan, Ecatepec, Coacalco, Melchor Ocampo y Tonanitla.

Ante esto, las autoridades han venido analizando las razones por las cuáles se generan estas afectaciones y llama poderosamente la atención que la principal causa de las inundaciones siga siendo la acumulación de basura en las salidas y pasos de agua. En el caso de la Ciudad de México, Protección Civil local, ha estimado que el 50 por ciento de las inundaciones son originadas por el taponamiento de las coladeras, por lo que se ha invitado a la ciudadanía amantener las calles libres de basura.

En esta misma línea, dentro de la entidad mexiquense, la Comisión del Agua del Estado de México (CAEM) realiza trabajos permanentes, así como preventivos para limpiar y desazolvar más 549 kilómetros de redes de drenaje y alcantarillado, así como 22 kilómetros de canales a cielo abierto y 2 mil 317 fosas sépticas. Además del retiro de basura de coladeras, del desagüe urbano, barrancas y cauces.

Sin embargo, pese a que las autoridades han venido haciendo su trabajo, gran parte del trabajo lo debe de realizar la ciudadanía. Ya que como parte de una iniciativa gubernamental se realizó con éxito la primera jornada de “Limpiemos nuestro Edomex”, con lo que se logró retirar mil 810 toneladas de basura con la participación de más de 24 mil servidores públicos, 21 mil escuelas de distintos niveles y 110 camiones con capacidad para 17 toneladas.

Debemos recordar que la labor de no arrojar basura en espacios no acondicionados para este fin no depende de los llamados a la acción que realicen las autoridades, más bien, está en manos de la propia ciudadanía prevenir incidentes que pongan en peligro el patrimonio y la integridad de las personas.

En relación con los fenómenos y recursos naturales, debemos tomar en cuenta lo que recientemente dio a conocer el Instituto Mexicano para la Competitividad (IMCO), sobre que el Estado de México cuenta únicamente con 266 metros cúbicos de agua renovable por habitante, lo que significa serel segundo estado con menor disponibilidad en este rubro. Por lo que ha recomendado a las entidades impulsar una regulación eficiente, gestión e inversión en infraestructura para garantizar el acceso y saneamiento de agua para consumo personal, doméstico, agrícola e industrial.

Si bien no podemos controlar los fenómenos naturales, debemos ser capaces de prevenir los efectos que puede provocar en las poblaciones y en las personas; como ciudadanía debemos actuar con ética y educación.